12/12/2006

Ahora que vienen las fiestas decembrinas, hago conciencia de lo que implica un hijo en estas fechas. Mis navidades siempre han sido buenas, nada extraordinario, claro que de niña siempre disfrute las sorpresas, los regalos...y además, recuerdo que cuando tenía 4 años, vi el trineo de santa claus por mi ventana, lo vi volando con unos renos y su carrito.
Luego más grande, soñé que los reyes magos me visitaban... Todavía recuerdo sus trajes.

Nuestra hija todavía es pequeña, pero pronto se unirá al espiritu consumista-navideño. Y la verdad no puedo negar que me provoca emoción. Sueño con ver su cara después de abrir ese juguete que deseó y pidió, con verla emocionarse en la espera de las sorpresas y de los sueños realizados.

Y es que, aunque esta fecha es de consumo, también es de emoción. ¿Acaso recibir un regalo no provoca sentimientos? Y la cena especial, los adornos, toda esa creatividad que fluye en el mundo con respecto a la ambientación para estas fechas...el calor de hogar, la unidad....aunque sea un hechizo temporal, es maravilloso.

No creo que con padres como nosotros, nuestra nena pueda traducir la navidad únicamente con recibir regalos. Tiene un papá bastante creativo, que sé que alimentará (al igual que yo) la ilusión de la niñez haciéndola partícipe de todo lo que hagamos.

Sueño con que nos ayude a decorar, hasta que me ayude a hacer al menos la ensalada navideña, jejeje... Es una época tan propicia para fomentar tantas cosas en los niños, que hay que aprovecharla.

Por lo pronto solo queda prepararle una receta distinta para esa noche, o darle algo especial que le guste, jejeje, aunque regalos no le faltaran con lo mucho que la quieren.

Esta en una etapa de apego con su papá que aunque ha sido algo compleja, creo que la vamos librando. Ahora es casi una niña, dice más palabras, imita más, hace gestos chistosos, baila, canta... y claro, también se queja más.

Pero verla crecer sigue siendo de las cosas más motivantes en mi vida, verla dormir y hacerse bolita en su cuna, y escucharla cuando despierta cantando, jugando, o llorando.

Entre sus novedades está que ya empieza a rayar los cuadernos, el refri, la mesa... Sí, y además jala cualquier cosa que ve que puede alcanzar de la mesa, o de cualquier superficie que encuentre.

Ya tiene su primera responsabilidad que es tirar su pañal, ja...Cuando ya está envuelto, solo hay que decirle “ve a tirar tu pañal”, y entonces lo toma, se baja de la cama, y se dirige al bote de basura en donde lo deja caer, con un gesto de satisfacción. Y espera su aplauso correspondiente, por haber sido una bebé responsable. Jaaaaa!

Sin más por el momento, me despido, deseando más navidades en familia, luces, cenas, y regalos para todos.

-Clau-